TU

El tan solo ver una mirada tuya, me enamoro. Se que enamorar suena muy profunda pero es así eres la persona perfecta, eres el indicado, el que yo siempre pensé y soñé no pensé que existieras ..... Yo solo pensaba que eras una imaginación en mi mente. Eras solo un sueño, una ilusión. 

La primera vez que te vi, fue una tarde de otoño en aquel antiguo café,   llamaste mi atención, lo suficiente para que enseguida me sintiera atada a ti, pero en mi mente yo lo negaba, ya que ni siquiera sabía tu nombre así  comenzaste a ser mi amor platónico, algo como simplemente un juego, eras como una celebridad que le gusta a alguien. 

Luego al pasar de los días te volvía a conseguir, ahora comenzaste frecuentar el lugar, yo te miraba de reojo, y entre tanto reojos aveces llegábamos a cruzar miradas. Esa era nuestra rutina. 

Para mi sorpresa, no tan solo comencé a encontrarme contigo, también te veía ahora cada vez que salia de mi casa, cuando iba a la librería, cuando iba a la plaza, al centro comercial, en todos lados. Ya esto se me comenzaba a hacer raro.

Un día te acercaste en el mismo café en el cual te vi por primera vez, te acercaste a mi preguntándome cual era mi bebida favorita de acá, que que te recomendaba tomar, te dije que era el mokaccino con crema batida, al tanto comenzamos a entablar una conversación. A partir de ese día, todos los días comenzamos a frecuentar el café, y nos sentábamos en la misma mesa en la cual hablamos por primera vez y comenzábamos a hablar, suena medio tonto, lo sé, pero era lo que hacíamos.

Empezamos a conocernos más tu tenías un gusto hacia el blues y el jazz, pero al mismo tiempo te gustaba el rock, estudiaba arquitectura, por lo tanto aveces llevaba algunos planos o fotos  y me los mostraba. Habían días que ninguno de los dos iba, cuando no te encontraba allí  solo pasaba un rato comía un  dulce o algo y me iba enseguida, cuando yo no iba el me reclamaba y yo solo me reía de tal cosa. 

La cuestión es que había algo bastante cómico en nosotros que aun a todas estas yo no sabía tu nombre ni tu el mio tan solo hablábamos y ya.

Hasta que un día me invitaste a salir, a un lugar muy bonito, yo simplemente te dije que no se, tu insiste e insististe, hasta que yo te dije que si, en eso me preguntaste mi nombre.

Yo - Sophie-
Él - Mucho gusto Sophie, yo soy Marco-
Sophie- Para mi no tanto- Lo decía bromeando
Marco -Por qué? No te da gusto conocer a alguien como yo-
Sophie - Porque no, haha mentira solo estoy bromeando contigo-
Marco- Mas te vale- 
Sophie- Bueno adiós, me tengo que ir-
Marco - Irás mañana?-
Sophie- No lo se-
Marco - Vamos, ya me habías dicho que si. Además no importa que yo te esperaré allí, se que tu irás-
Sophie -Realmente no lo sabes, lo más probable y te deje esperando-
Marco - Ok, no se te olvidé mañana a las 7pm nos encontramos aquí  y luego te llevaré otro lugar. Te espero aqui -
Sophie- No lo se- Dijo mientras se iba 

Realmente yo si quería ir contigo pero había algo que me decía que no. Yo soy muy masoquista, lo sé. No quería ir, ya te había figurado como algo platónico y no quería que algo más sucediese, aunque no te miento por dentro estaba emocionada de el que me invitarás a salir. Al llegar a mi casa comencé a saltar y gritar estaba entusiasmada y solo gritaba - ME INVITO A SALIR- no podía dejar de pensar como sería esa cita y también que no quería emocionarme, no quería llevar a otra cosa, pero al mismo tiempo pensaba que por una sola salida no iba a ocurrir más nada, me contradecía a cada momento.

Al día siguiente me desperté, era una mañana muy bonita, el sol brillaba, me vestí, salí. Por casualidad me lo encontré en la biblioteca como ocurría aveces, pero nunca hablábamos allí, no importa donde nos viéramos,era como si sólo nos conocíamos en el café, no se porque simplemente era así, pero ese día fue la excepción, te acercaste a mi diciéndome -Te veré esta tarde- apoyándote de la torre de libros que estaba a mi lado, yo simplemente te respondí- No te confíes, estoy considerando el no ir- agarre el libro que estaba estudiando, agarré los demás y al pararme se me cayeron unos libros, los recogiste velozmente del piso y dijiste -Cuidado con los libros, al parecer estos se están tratando de escapar de ti- dándome los libros,  yo solo los agarré y seguí caminando, mientras yo me alejaba dijiste -Te veré hoy-.

A la tarde a eso de las 4.30 pm al salir de todas mis clases, salí mas temprano de lo habitual, me quede pensando a ver que iba a hacer ese día, ya que no pensaba irme a mi casa debido a que era un viernes y no tenía ánimos, comencé a  llamar a ver si planificaba algo con otras personas para mi mala suerte ya todo el mundo estaba ocupado, en eso me acordé de tu invitación, fui a mi casa enseguida y leí un poco, al ver que ya eran las 6.00pm, comencé arreglarme para mi salida contigo,  puse música a todo volumen mientras me arreglaba, al terminar veo la hora y eran ya las 7.30pm, salí corriendo, y fui hasta el café, pensé que ya te habías ido, mire alrededor, me senté en nuestra mesa, por así decirle, cuando a los minutos siento que alguien me tapa los ojos y dice sorpresa, a los segundos me destapan los ojos y veo en la mesa una de las fotos que me habías mostrado en una de tantas pero esa no la podía olvidar, era de un edificio muy alto, me dice -Te dije que ibas a venir- y le volteo la mirada con un toque odioso. Lo cierto es que luego me llevo a comer a un lugar donde había una infraestructura hermosa, no sabía de la existencia, adentro había un pequeño restaurante, bastante acogedor, comimos, al estar allí me pregunta si no reconozco el edificio, al sacar la foto de mi bolso me fijo que es la edificación del lugar. 




Al salir cerca había una playa, tu simplemente espontáneamente corriste y te lanzaste al mar, luego saliste al darte cuenta que no te seguí y comenzaste a perseguirme hasta que me atrapaste y lanzaste al agua salada y fría, pasamos una noche bastante divertida, cuando me llevaste a mi  casa abrí la puerta y te quedaste en la puerta esperando el beso cliché que hay al final de las citas, cuando ya estábamos a punto de besarnos simplemente voltee y te dije -No- con una sonrisa en la  cara, antes de entrar me agarraste del brazo antes de que yo entrará y me dijiste -Me podrías dar tu número?- yo simplemente te lo dí en eso te fuíste y entre normal a mi casa, al cerrar la puerta quedé pensando y no faltaron como mas de 40 mnts para yo recibir tu llamada, quedamos hablando toda la noche....

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